«M. Proudhon ha escrito en sus Confesiones de un revolucionario estas notables palabras: "Es cosa que admira el ver de qué manera en todas nuestras cuestiones políticas tropezamos siempre con la teología". Nada hay aquí que pueda causar sorpresa, sino la sorpresa de M. Proudhon. La teología, por lo mismo que es la ciencia de Dios, es el océano que contiene y abarca todas las ciencias, así como Dios es el océano que contiene y abarca todas las cosas» (Donoso Cortés).

jueves, 25 de septiembre de 2014

ALBORÁN: Sodomitas y traidores

El diccionario de la Real Academia de la Lengua da los siguientes significados para la palabra maricón: 1- marica: hombre afeminado, homosexual. 2- sodomita: hombre que comete sodomía (práctica del coito anal; hasta hace apenas un año la primera acepción de la palabra pederastia era “abuso sexual cometido con niños” y la segunda “sodomía”). 3- insulto grosero con su significado preciso o sin él.

Viene lo anterior a colación ante el reciente “bodorrio” de dos hombres celebrado en Sevilla y del que circula por la red una muy expresiva foto.

La peculiaridad de la misma es que refleja que uno de ellos parece ir vestido de uniforme de gala del Ejército de Tierra y estar ambos acompañados, a la salida del acto, de una veintena de uniformados que hacen el “arco” con sables.
En este decadente mundo occidental antes cristiano ya no es noticia el que la sodomía haya pasado de ser una práctica antinatural y un “pecado nefando” [1] a un derecho impuesto por los Estados en contra de sus seculares legislaciones y de la mayoría de sus ciudadanos, imposición que se ha hecho de la mano del poderoso grupo de presión homosexual y éste de la Sinarquía que nos gobierna desde los Estados Unidos y la ONU.

Pero que esta perversión se introduzca en las Fuerzas Armadas es un significativo avance, pues va en contra de sus más restrictivas normas y valores, basadas todas en que el duro oficio de hacer la guerra no es compatible con desórdenes que pongan gravemente en peligro la cohesión de sus filas.

No obstante ello, de esos mismos Estados Unidos, que durante muchos años consagraron el “No preguntes, no digas” como avanzadilla al desmantelamiento moral, ya nos han llegado noticias de “bodas” homosexuales de militares, en recintos militares, incluido West Point, aunque generalmente entre clases de Tropa. Por supuesto, la “moda” se ha seguido en Inglaterra y en la desgraciada Argentina (boda entre un Teniente Coronel y un Capitán hace dos años). Pero también aquí, donde hace ocho años, según El Mundo, “Alberto Sánchez Fernández y Alberto Linero Marchena, dos soldados destinados en la base de Morón de la Frontera (Sevilla), se casaron hoy en el Ayuntamiento de Sevilla vestidos con el traje de gran gala del Ejército del Aire, en la primera boda entre militares homosexuales españoles”. Por supuesto, se pasaron por la entrepierna las normas de uniformidad, vistiendo un uniforme y unos emblemas y distintivos no reglamentarios para ellos. No hubo reacción inmediata alguna por el Mando.

Ahora se ha dado un paso más en esa Sevilla donde el grupo de presión homosexual debe contar con muy considerables apoyos.

Porque lo que nos muestra la foto es un delito de sedición (insubordinación colectiva pública), además de otros aspectos que atentan contra la dignidad de los Ejércitos: utilización de uniformes, emblemas, condecoraciones y otros elementos no reglamentarios (sables, utilizados al hortera estilo yanqui cruzándolos por delante de la pareja) por esta veintena de militares “profesionales”, la mayoría de los cuales son Tropa y muchos “Especialistas” pertenecientes al Grupo Hawk II/74 del Regimiento de Artillería Antiaérea nº 74.

Sin duda estos bizarros soldados estarán encantados al ir a Turquía a defender a la OTAN de la “peligrosísima” e inexistente amenaza aérea del ejército de ese Califato aupado por Estados Unidos, quizás pensando en que les amplíen sus horizontes; y esta suposición no es gratuita, pues la única batería Patriot tendrá que ser reforzada con elementos del resto del regimiento ante la endémica falta de cobertura de plantillas.

Hemos enlazado intencionadamente la apología de la homosexualidad y el delito de sedición con la implicación de España en escenarios del Oriente próximo, incluida nuestra Fragata “Almirante Juan de Borbón” en el Mar Negro, porque todos estos hechos demuestran no solo los resultados de nuestra política de Defensa y el estado de nuestros Ejércitos, donde no es el menor problema la “cualidad” de un Mando absolutamente plegado a la sumisión política y capaz de transigir con las mayores barbaridades. Y barbaridades son el enviar a Turquía nuestro único sistema antiaéreo para grandes alturas y con cierta capacidad antimisil, desprotegiendo el Estrecho y toda España, máxime frente un Marruecos cada día más insolente y armado.

Pues eso, hay mucho traidor y mucho sodomita, pero tanto el de arriba como el de abajo atentan contra el Código de Justicia Militar, la esencia de la Institución y la Patria en general, una España donde han conseguido que menos de un 20 % de sus miembros quieran defenderla y donde se aprestan a rendir honores al presidente de una Cataluña independiente.

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[1] “No te echarás con varón como con mujer, es abominación” (Lv 18:22). “Si alguno se juntare con varón como con mujer, abominación hicieron; ambos han de ser muertos, sobre ellos será su sangre” (Lv 20:13). “¡No os engañéis! Ni los impuros, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los homosexuales, 10 ni los ladrones, ni los avaros, ni los borrachos, ni los ultrajadores, ni los rapaces heredarán el Reino de Dios” (1 Corintios 6, 9-10). Pasajes bíblicos que directamente condenan las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo por ser pecaminosas en sí mismas: Génesis 19:1-29; Levítico 18:22; Levítico 20:13; Deuteronomio 23:17-18; 1 Reyes 14:24; 1 Reyes 15:12; 1 Reyes 22:46; Jueces 19:22; 2 Reyes 23:7; Romanos 1:24-27; 1 Corintios 6:9.;1 Timoteo 1:8-10; 2 Pedro 2:6. Santiago 1:7; Éxodo 20:14. El pecado nefando en épocas estuvo condenado hasta con la excomunión y la muerte.

Alborán [*]






[*] El ‘Colectivo Alborán’ lo forma un grupo de altos mandos del Ejército español, retirados y en activo, que cuentan con una cualificada experiencia militar y una notable preparación académica. A todos ellos les une un denominador común: el amor a España y la preocupación ante los acontecimientos que vive nuestra nación.