En el contexto de la ofensiva sobre Peñarroya, último y desesperado intento del Gobierno de la República por cambiar el signo de la guerra, el Ejército Popular ocupaba por escasos días la población pacense de Peraleda del Zaucejo el 7 de enero de 1939.
Pocas cosas habían cambiado desde 1936. Como si estuviéramos en los primeros días de la guerra, las escenas de terror se repitieron: en el sitio denominado Facunda fueron asesinados tres guardias civiles (José Pérez Costa, Antonio Barragán Platero y Nazario Prado Ramos), pudiendo escapar el Cabo cuando lo llevaban a fusilar, en Fuente Sancha el vecino de Castuera Manuel Caballero Morillo y a la salida del pueblo en el Camino de Los Blázquez, el Teniente de Alcalde del Ayuntamiento Justiniano Haba Haba. En las órdenes intervino un Comandante que mandaba la 88 Brigada y un hermano suyo ambos naturales del pueblo de Bujalance (Córdoba). También fusilaron a dos soldados de nombre desconocido para nosotros que la noche antes se habían evadido de las filas del Ejército Popular para pasar a zona nacional.
Datos procedentes de: Informe de la Guardia Civil (Peraleda del Zaucejo, 12-octubre-1941), AHN, CG, Leg.1052(2), Pieza Principal, Ramo de Peraleda del Zaucejo; AGMA, ZN, Leg.35, Carp.17, Informe de la Guardia Civil (Llerena, 14-octubre-1940).