El 19 de julio y para que pudiesen incautarse las turbas amparadas por las autoridades municipales de las armas que estaban en poder de las personas de orden, se detuvo a mas de sesenta personas de derechas, entre las cuales se encontraban elementos civiles, militares retirados y hasta el Sr. Juez de Instrucción del partido. Algunas de ellas, las menos, fueron llevadas a la Cárcel, y a las demás, en número de cincuenta y cuatro, se les condujo primeramente a los locales del Ayuntamiento, donde permanecieron tres horas y media, y después a la sacristía de la Iglesia parroquial, situada frente a aquél.
A las tres y media del referido día y previo toque de campanas, las turbas tirotearon a los que se hallaban en la referida Iglesia, que fue rociada con gasolina. Los disparos se sucedían sin interrupción y empezaba a arder el templo, por lo que los detenidos sufrieron los primeros síntomas de asfixia. Mientras unos buscaban la salida, donde fueron sacrificados sin piedad por descargas de los rojos, otros se refugiaron en la torre ancha de la Iglesia, dominada por otra torre desde la cual también se les hacían disparos. A las siete aproximadamente, fueron sacados uno a uno de la mencionada Iglesia y conducidos nuevamente al Ayuntamiento, donde permanecieron hasta el día siguiente, en que fueron trasladados a la Cárcel del partido.
Consecuencia de los disparos de las turbas fue la muerte de D. Manuel Macías Tomás, D. José María Manzano Marín, D. Francisco Álvarez Rojas, D. Fernando Carrascal Salamanca. Otras doce personas perecieron abrasadas o carbonizadas, entre ellas D. Juan Esteban Pagador, D. Luis Ibarra Pérez, D. Francisco Bermejo Rubio, D. Andrés García Gómez, D. Antonio Díaz Lancharro, D. Manuel Sánchez Boza, D. Manuel Iglesias González y D. Fernando Pagador Rosario.
Las turbas profanaron las Iglesias de Nuestra Señora de la Hermosa, la de la Misericordia y la del Carmen, cuyas religiosas Carmelitas fueron objeto de infames vejaciones por rameras de la localidad, que actuaron con permiso de la autoridad gubernativa roja. Fueron pasto de las llamas los archivos del Juzgado de Instrucción, Registro de la Propiedad y Protocolo corriente de la Notaría.
Puede añadirse a todo lo relatado los innumerables atropellos cometidos en las propiedades y personas de orden del pueblo que ha quedado sumido en la pobreza más absoluta.
GRANJA DE TORREHERMOSA (PROV. Badajoz)
A Continuación damos un informe médico pericial sobre los cadáveres hallados a las puertas del Cementerio al llegar las tropas libertadoras y de los cuales insertamos algunas fotografías.
Informe médico pericial acerca de los cadáveres encontrados insepultos en el pueblo de Granja de Torrehermosa
Los Doctores J.Derqui y Goyena, Manuel Reyero Trulías y José Reyero Trulías, encargados de redactar este informe, certifican con su firma la veracidad de lo que posteriormente expresan:
En el exterior del Cementerio de dicho pueblo, y al lado izquierdo de la puerta que le da entrada, se encontraba profusamente hacinado un montón de cadáveres en número de once, de los cuales ocho eran de mujeres de diversas edades, dos de niñas y uno de hombre. El estado de descomposición de tales cadáveres dificultaba extraordinariamente un reconocimiento minucioso y detallado de los mismos. Con toda seguridad la muerte violenta que han sufrido estas víctimas se produjo de cuarenta y ocho a setenta y dos horas antes de hacerse este informe.
La identificación de las víctimas se hizo difícil por la causa antes dicha y no pudo ser completa. Sin embargo, los datos conseguidos son los siguientes:
1º.Cadáver de hombre de unos 60 años de edad, herida de hacha en la región parietal izquierda y herida de bala en la región precordial.
2º. Cadáver de niña de unos 5 años de edad, herida de hacha u otro instrumento cortante y pesado, en el parietal derechos, fractura completa del brazo y antebrazo derecho y extensas contusiones en la región lumbar y dorsal. La muerte fue producida, al parecer, por golpe violento de la víctima contra el suelo o pared, con fractura de la extremidad superior derecha y contusiones, y una vez en el suelo herida en el cráneo.
3º Otro cadáver de niña de unos 9 a 10 años, fractura con magullamiento del cráneo, sin herida aparente, fractura completa del brazo derecho y signos de violación o intentos.
4º Cadáver de joven de 22 a 26 años, con tremendo golpe entre el parietal izquierdo y el occipital, con hundimiento de la bóveda craneana, salida de la masa encefálica e inclusión del pelo dentro del cráneo, balazo en la región maxilar derecha, sin orificio de salida, seguramente producido por bala de plomo de un calibre de 44 a 48.
5º Cadáver de mujer de unos 58 a 60 años de edad, extensa herida por hacha al lado derecho del cráneo y cara.
6º Cadáver de joven de unos 30 años de edad, con desarticulación completa de la cabeza, contusión extensa en la región frontal izquierda y desgarramiento de la vulva por objeto contundente. En esta víctima hubo posible violación hecha con anterioridad.
7º Cadáver de mujer con extensa herida cortante, posiblemente producida por hacha en la ingle derecha, con rotura del paquete básculo-nervioso y capas musculares, no pudiéndosele hacer una inspección persecución religiosa encontrarse debajo de los otros cadáveres.
8º Cadáver de mujer con extensa herida en la cara interna de la pierna izquierda, producida por hacha, con desgarramiento de todos los tejidos.
9º Cadáver de mujer de unos 24 a 26 años de edad, con magullamiento del cráneo, desarticulación de la cabeza, fractura del brazo derecho, exostalmia del ojo izquierdo, contusiones en la región genital producidas por una posible violación.
10º Cadáver de mujer con herida extensa por instrumento muy cortante en la región maxilo-parietal-temporal izquierda.
11º Cadáver de mujer que por encontrarse completamente debajo de los demás no pudo ser reconocido.
Granja de Torrehermosa a las trece horas del día 27 de Septiembre de 1936. (Firmado): Dres. Carlos J.Derqui y Goyena, Manuel Reyero Trulías y José Reyero Trulías.- Rubricado
Tomado de: Segundo avance del informe oficial sobre los asesinatos, violaciones, incendios y demás depredaciones y violencias cometidos en algunos pueblos del Mediodía de España por las hordas marxistas al servicio del llamado Gobierno de Madrid. Julio, agosto y septiembre MCMXXXVI, Estado Español, [Burgos]? , 1936, pp.